El encanto de las Selvas Submarinas

El océano es apreciado por ser la cuna de la vida en nuestro planeta. Siempre ha cautivo al ser humano y lo ha invitado para que intente descubrir sus secretos. Sin embargo, continúa siendo una caja de pandora, dado que aún no hemos descubierto todos sus fascinantes misterios.

Como resultado de esta enigmática apreciación, me enfocaré en contarles sobre uno de los ecosistemas más extraordinarios y fantásticos del océano, los arrecifes de coral. Estos se desarrollan, principalmente, en aguas tropicales, y se calcula que un 0,17% del total de la superficie del planeta está dominada por los arrecifes de coral. En consecuencia y debido a su incomparable belleza, diversidad de formas, colores y diseños, y por la gran cantidad de vida que albergan, han sido denominados: Selvas Submarinas.

A los arrecifes de coral se los ha calificado como un ecosistema único en el mundo, pues se forman totalmente por actividad biológica, es decir, que los organismos marinos a través de sus actividades biológicas se encargan de construir estas hermosas edificaciones acuáticas. Es así, que los arrecifes, mediante la actividad biológica, se convierten en depósitos de carbono de calcio producido principalmente por los corales, las algas, las esponjas, entre otros organismos.

Los arrecifes necesitan de condiciones idóneas para existir: aguas cálidas, claras y poco profundas. De ahí que, exista ausencia de corales en las costas de nuestro país, puesto que está presente la Corriente Fría de Humboldt. Sin embargo, existen formaciones rocosas con parches de coral que, de igual manera, albergan un sin número de organismos. En Ecuador tenemos las colonias coralinas de las Islas Galápagos y las grandes zonas de coral en la zona costera del Parque Nacional Machalilla y en la Isla de la Plata.

Desde hace muchos años los arrecifes han sido la base para la subsistencia de numerosos pueblos costeros a nivel mundial. No obstante, el uso tradicional de los arrecifes ha cambiado y la degradación de estos se ha generalizado alrededor de todo el mundo. Esta degradación es producto de la pesca excesiva, pues esta se basa en la extracción desmedida de los recursos marinos, principalmente peces, moluscos, crustáceos y el pepino de mar (especie que ha sido explotada en nuestro país, a tal punto de llevarla casi a su extinción). Además, al arrojarse grandes cantidades de desechos al mar se ha reforzado la destrucción y deterioro de estos ecosistemas.

 

Mediante estudios se ha determinado que existen 600.000 kilómetros de arrecifes de coral, de los cuales un 10% está degradado y sin posibilidad de recuperación. Además, se prevee que exitirá un gran porcentaje que se encontrará en condiciones críticas en los siguientes años. Consecuentemente, si no se realiza un manejo costero eficiente, la mayoría de los arrecifes de coral en el mundo estarán en peligro de desaparecer y con ellos muchas especies marinas. Las cuales sirven al ser humano de alimento, en la producción de sustancias y en la ejecución de procesos que preservan el equilibrio marino y, por ende, el equilibrio ambiental.

Es necesario que se tomen medidas desde los gobiernos. Acciones políticas de control y protección costera y ambiental, puesto que si se continúa dando preferencia a las demandas económicas; sin darnos cuenta, poco a poco, se perderá la magia, la belleza y el encanto de nuestras selvas submarinas.

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